Cuando se empieza a decorar galletas con glasa tenemos tanto miedo empezar con ella que a veces no sabemos ni por dónde empezar
Os voy a explicar en pocos pasos a hacer una glasa casi perfecta para que podáis decorar vuestras galletas sin más
Yo siempre uso polvo de merengue, me parece lo mejor aunque quizás no es lo más fácil, pero una vez que cojáis el tranquillo os saldrá como churros y ya solo es calcular las cantidades necesarias para cada consistencia
También podéis usar el preparado de roya icing de "Funk Cakes" que también da mucho juego y solo hay que añadir agua y poco más
Os dejo mi receta, yo normalmente la glasa primaria que hago es una glasa optima para trabajar en el momento, válida tanto para rellenar ( a no ser que sean galletas muy grandes, por lo que recomiendo que esté un poco más licuada) como para empezar a decorar galletas necesidad de delinear
GLASA CONSISTENCIA MEDIA
750 g de azúcar glas bien tamizada
140 g de agua tibia
45 g de polvo de merengue
una cucharadita de sirope de maiz ( opcional, pero os dará brillo y elasticidad)
unas gotitas de colorante blanco
En la amasadora y con las varillas batís el agua junto con el polvo de merengue a velocidad rápida durante un par de minutos. Veréis que la en la mezcla hay espuma, y el fondo está líquido
Cambiáis las varillas por las palas y echáis el azúcar de golpe, mezcláis a velocidad media hasta que este incorporado, durante un minuto más o menos. Echamos el sirope y volvemos a batir durante unos 8/10 minutos a velocidad baja. Esto es importante, tiene que batir mucho pero muy despacio para que no coja aire
Y eso es todo. Os tiene que quedar una consistencia media de unos 20 segundos. Esto es, que levantamos la cuchara con glasa, la volcamos en el cuenco y tiene que desparecer la marca en 20 segundos. En caso de que os quedara demasiado clara, podéis añadir otros 50 gramos de azúcar tamizada hasta encontrar la consistencia adecuada o la que más uséis.
Yo hago siempre esta porque es la que más uso. Más adelante prepararé las otras consistencias menos utilizadas
Una vez que tengáis la glasa preparada, podéis conseguir distintas consistencias ya bien sea añadiendo azúcar o añadiendo agua.
Yo suelo usar tres consistencias de glasa para mis galletas
Consistencia de relleno 10 segundos
Es una glasa bastante licuada, quizás es la que menos uso, pero viene bien para rellenar galletas grandes sin problemas de secado a medio relleno. También es muy útil para la técnica wet-wet
Es aconsejable delinear las galletas para que no rebose la glasa por los bordes ya que es bastante líquida
Consistencia media 20 segundos
Esta es la que más uso. Sirve para rellenar galletas pequeñas medianas sin necesidad de delinear e ir decorando las galletas de tirón, sin problemas a que se desparrame por los lados. Puedes preparar las galletas en relieve e ir haciendo texturas según se va secando
Continencia fuerte
Debéis ir echando azúcar hasta que la consistencia sea tan dura como la pasta de dientes. Para saber que la consistencia es fuerte, tenéis que separar la glasa con una cuchara y no se tiene que juntar
La foto es un poco mala, intentaré cambiarlas en cuanto vuelva a hacer más glasa
Técnicas de cestillo, cabellos, volantes, brush embroidery ... como se va secando rápidamente es genial para estos decorados
Para las texturas tipo efecto madera o decapado también es mejor usar la glasa fuerte, para que al marcar nuestros tablones, ladrillos o decapados se queden marcados y la glasa no se junte
Os ha quedado un poquito más claro?
Pues ahora toca practicar una y otra vez hasta que os salga la adecuada.
Lo más importante que tenéis que tener en cuenta es que no coja aire para que al secarse no se formen los desagradables cráteres que luego no hay quien los disimule
Besitos
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